Polvo doméstico: peligroso y diminuto enemigo de la salud en el hogar

• Los contaminantes en el polvo doméstico pueden ser 100 veces más riesgosos para la salud de los bebés que para los adultos.
• En promedio, hay más de 2000 tipos distintos de microbios en el polvo que respiramos.
• 1 metro cuadrado (m2) de alfombra, puede contener hasta 1,000 ácaros de polvo.

Con el periodo de confinamiento social derivado de la pandemia de COVID-19, el tiempo de convivencia y actividades dentro de espacios cerrados se volvió casi total. Esto ha provocado que las personas concentren sus esfuerzos en mantener limpio el lugar donde viven y así evitar el rastro del virus en las superficies. 

Sin embargo, dentro de una vivienda, existe un enemigo diminuto que ha vivido más tiempo con nosotros, y también resulta ser muy dañino para la salud. Nos referimos al polvo doméstico. Éste suele ser el culpable de varias afectaciones para el organismo que pueden ir desde la irritación en la piel o la nariz, hasta padecimientos más severos como la congestión o el asma. 

A simple vista, el polvo doméstico no parece ser un problema difícil de eliminar, quizá por ello no somos conscientes de la amenaza que representa para la salud de quienes nos rodean; con esto en mente, trataremos de descubrir a esta peligrosa y casi imperceptible plaga que acecha nuestros hogares.

Lo primero que debemos entender es que el polvo común de una casa es mucho más complejo de lo que parece, ya que no está formado de un sólo elemento o partícula alérgena, sino que es un conjunto de componentes que incluyen ácaros (que son los principales factores alérgenos debido a sus heces), bacterias, moho, pequeños insectos y más de 2,000 tipos distintos de microbios presentes.

El tamaño de estos componentes es microscópico. Los ácaros del polvo y las esporas de moho a menudo miden entre 0.5 y 5 micras (la milésima parte de un milímetro) Pongámoslo así, el diámetro de un cabello humano es de alrededor de 50 micras, entonces, estos agentes son hasta 10 veces más diminutos. En pocas palabras, son imperceptibles a la vista.

¿Somos generadores del polvo en nuestra casa? En parte, ya que también contiene un alto porcentaje de células de piel humana, que es el alimento de los ácaros.

Lo que, desafortunadamente, resulta más fácil, es encontrar polvo en la casa, ya que se acumula en casi todos los rincones; sin embargo, hay que tener especial atención en la ropa, algunos muebles y superficies tapizadas, ya que la concentración de ácaros es mayor en estas superficies. Como muestra de esto, tenemos que 1 metro cuadrado (m2) de alfombra, puede contener hasta 1,000 ácaros de polvo.

Estas pequeñas partículas encuentran su hábitat preferido en climas húmedos, pero también resisten condiciones oscuras y cálidas, como los colchones de la casa. Es por ello que las camas son un foco importante de concentración de polvo doméstico, ya que estos muebles pueden contener entre 100,000 y más de 1 millón de ácaros.

¿Cómo podemos evitar y eliminar el polvo de nuestros hogares? 

Dejar nuestra casa libre de polvo no es una actividad complicada, pero lleva su tiempo; además de que hay que ser muy minuciosos al momento de limpiar cada espacio y habitación donde pueda acumularse. Es importante prevenir la aparición de polvo, y esto se puede lograr con algo tan simple como limpiar objetos cada día con un trapo húmedo, trapear el piso entre dos a tres veces a la semana y aspirar muebles, colchones y alfombras constantemente. 

El ambiente del hogar también influye en la aparición de polvo. Recuerda que los ácaros se sienten cómodos en climas húmedos, por lo que se recomienda tener un porcentaje de menos de 50% de humedad dentro de casa, para reducir la posibilidad de que estos alérgenos se aglomeren.      

Desde hace años, la tecnología se ha convertido en una gran aliada para mejorar la vida de las personas y solucionar problemas simples de manera eficiente. Frente a esto, los ingenieros y microbiólogos de Dyson han buscado el mayor entendimiento del polvo de casa, con el objetivo de optimizar dispositivos como aspiradoras, purificadores y humidificadores, los cuales ayuden a eliminar las partículas contaminantes y los alérgenos de una vivienda.

Después de intensos procesos de investigación, se ha identificado y probado que la mejor manera de eliminar las bacterias, el polen y los alérgenos de los ácaros de polvo es por medio de tecnología de ciclos de fuerte succión, así como filtros avanzados que capturan polvo visible e imperceptible a la vista. Con esto, Dyson ha desarrollado y optimizado sus productos que no sólo capturan hasta el 99.97% de partículas que pueden alcanzar tamaños tan pequeños como 0.3 micras, sino expulsar el aire purificado y libre de alérgenos.

Con esta doble acción, se logra la generación de un ambiente ideal para vivir en una casa, realizar cualquier tipo de actividad y pasar el tiempo que sea necesario en un interior, previniendo riesgos en la salud de las familias.