Este regreso a clases, cuidar la salud visual de tus hijos es más importante que nunca

Cuidar de la salud visual de nuestros hijos debe de ser cosa de todos los días, sobre todo si se encuentran en edad escolar, ya que es en el salón de clases donde comienzan a manifestarse los problemas de la vista y por consiguiente, tienen consecuencias tales como el bajo rendimiento académico.

Según datos de la Academia Americana de Oftalmología, 1 de cada 4 niños presenta problemas de visión que al no ser detectados a tiempo, podrían generar complicaciones a mediano y largo plazo, tales como la ceguera. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud, el 80% de los casos de ceguera en el mundo, podrían prevenirse con un diagnóstico temprano.

Durante la infancia, el proceso de aprendizaje del ser humano se apoya en un 80% en la información visual, por lo que un problema de la vista implica un bajo rendimiento escolar, dificultades en el aprendizaje y retraso en su desarrollo psicosocial. Un diagnóstico oportuno y el tratamiento adecuado ayudan positivamente a su recuperación y evitan el desarrollo de discapacidades visuales en la edad adulta.

En muchas ocasiones, los padres y maestros no detectan a tiempo las deficiencias visuales de los niños, generando en ellos calificaciones muy por debajo de lo que podrían alcanzar si gozaran de un adecuado sentido de la vista.

Si notas que tu hijo acerca mucho los libros para leer o escribir, presenta enrojecimiento y lagrimeo, confunde las letras o números, presenta dificultad para leer o se queja de dolor de cabeza al momento de esforzar su vista, es momento de que lo lleves con un especialista para realizar un diagnóstico adecuado.

Una gran alternativa para solucionar los problemas de visión de tus hijos, son las lentes EYEZEN® KIDS ideales para niños entre 6 y 12 años, ya que ofrecen una solución todo en uno que ha sido probada en condiciones reales y ofrecen tanto comodidad como protección.

Estas tienen la función de relajar y proteger sus ojos en circunstancias normales, también lo hacen cuando estos se encuentran frente a las pantallas, les brindan una visión más nítida en cualquier dirección y se adaptan de una manera cómoda a cualquiera de sus actividades diarias.

No solo ayudan a mejorar la claridad de la visión, sino que también protegen sus ojos de la luz nociva y proveen de un mayor confort visual. Además, la tecnología Eyezen® DualOptim™ Kids le brinda a tus hijos un campo visual hasta 60% más amplio que en un lente monofocal estándar y 60% menos aberraciones en la zona inferior. Eso sí, sin alejarse de la comodidad que caracteriza a la marca.

Que el regreso a clases no te agarre desprevenido, bríndale a tus hijos las herramientas necesarias para contar con una mejor salud visual y por consiguiente, una mayor calidad de vida. No olvides que antes de tomar una decisión, es necesario consultar con un especialista.