Comunidad Médica

Una encuesta realizada por Doctoralia revela los hábitos de los pacientes para guardar los datos sobre su salud

A partir de la pandemia por COVID-19 muchos hábitos se han modificado y el sector salud no es la excepción. Actualmente los pacientes digitales agendan sus citas médicas a través de aplicaciones y plataformas web, asisten a consultas en línea, se comunican con sus médicos por diversos canales, compran medicamentos online y comparten sus experiencias en portales de salud.

Sin embargo, aún hay mucho qué explorar acerca de los hábitos de los pacientes y un punto importante es conocer si almacenan sus datos médicos y cómo lo hacen. Por ello, Doctoralia, la plataforma líder que conecta a profesionales de la salud y pacientes, realizó una encuesta a 8772 personas de seis países: Brasil, Italia, Polonia, Turquía, México y España, para responder a preguntas como:

  • ¿Qué tipo de datos de salud almacenan los pacientes?
  • ¿Qué canales se utilizan para almacenarlos?
  • ¿Cómo llevan su información de salud a las citas?
  • Cuando agregan datos de salud, en ¿dónde los almacenan?
  • ¿Tienen dificultades para almacenar y compartir datos de salud?

La encuesta reveló, en primer lugar, que un alto porcentaje de participantes de todos los países encuestados no almacena ningún dato de salud. El porcentaje es mayor en el caso de Turquía, con un 79.5%, mientras que en los demás países la proporción va del 38 al 40%.

Al preguntar sobre las razones por las que no conservan sus datos de salud, los pacientes respondieron que simplemente no lo acostumbran (o ni siquiera lo habían pensado), o bien por descuido o falta de organización, no creen que sea necesario o tienen muy pocos datos qué almacenar.

Por su parte, los pacientes que sí almacenan su información, guardan sobre todo pruebas de laboratorio y resultados de exámenes de diagnóstico. Los mexicanos suelen almacenar también recetas.

Al cuestionarlos sobre qué tipos de canales utilizan para almacenar la información, los encuestados manifestaron un alto uso y preferencia por el formato físico, en folders de papel: en Polonia lo hace así el 94.8%, en Italia el 85.2% y en México el 73.9%. También se observó que un buen porcentaje de pacientes no tienen preferencia (en México y España) o prefieren guardarlos en el celular (Brasil y Turquía).

En general, los pacientes que almacenan datos de salud en dispositivos electrónicos lo hacen en sus smartphones, computadoras o en la nube (Google Drive) y suelen acceder a dichos datos una vez al año y/o entre seis meses y un año.

Con respecto a compartir información, esta se comparte principalmente a los profesionales de la salud (84.4% en Polonia y 59.7% en México) y, ocasionalmente, a miembros de la familia. En Brasil el 30.3% de los entrevistados prefiere no compartir sus datos médicos, mientras que en México el 46.2% la comparten con familiares. Asimismo, se observó que los pacientes de todos los países llevan sus datos de salud a consultas de primera vez, citas periódicas y citas antes o después de exámenes médicos.

Finalmente los encuestados expusieron sus dificultades a la hora de guardar su información de salud: o la almacenan en distintos lugares o la pierden, no tienen tiempo u olvidan guardarla; los datos están en un formato o canal distinto, no son de fácil acceso o no se tienen los conocimientos tecnológicos para almacenarlos.

Si bien la información obtenida en este estudio es valiosa, es necesario seguir explorando los hábitos de los pacientes, así como obtener la opinión de los profesionales de la salud. Todo ello a fin de optimizar las herramientas digitales para un mejor acceso y almacenamiento de los datos, y así seguir brindando una experiencia de salud más humana.