Cáncer

Todo lo que necesitas saber sobre el cáncer de piel

De acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM), estamos viviendo olas de calor cada vez más fuertes, actualmente el país atraviesa temperaturas extremas históricas y desafortunadamente esto es una realidad que se vive de manera global, especialmente en los últimos ocho años.  

Por eso, los expertos del Programa Belleza y Bienestar de CANIPEC te recuerdan la importancia de proteger tu piel de las altas temperaturas y de los daños que puede causar los rayos UV. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se producen entre dos y tres millones de casos de cáncer de piel en el mundo, México es el segundo país con más frecuencia de casos diagnosticados cada año en más de 16 mil mexicanos.  

El cáncer de piel se produce por el crecimiento anormal y descontrolado de las células de la piel, principalmente alteradas por la radiación UV. Existen varios tipos de cáncer de piel, los más comunes son: carcinoma basocelular, carcinoma epidermoide y el melanoma que según la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD) es de tipo mortal y más agresivo, aunque menos frecuente.   

El daño provocado por la radiación ultravioleta en las células es acumulativo, por lo que el riesgo de padecer cáncer de piel se incrementa con la edad, especialmente en los carcinomas. 

¿Qué puedes hacer para reducir el riesgo de cáncer de piel? 

Aunque algunos tipos de cáncer de piel tienen un componente genético, hay 6 cosas que puedes hacer para prevenir su aparición. 

1.     Visita a tu dermatólogo 

Aunque no tengas ningún problema, es fundamental agendar una cita anual para revisar tu piel, recuerda que es el órgano más grande del cuerpo, así que solo un experto podrá revisar zonas de tu cuerpo que no puedes vigilar fácilmente. 

2.     Protégete lo más que puedas  

Mantente en la sombra siempre que te sea posible, usa sombrero, gorra, lentes, y ropa de algodón de manga larga, especialmente en días de altas temperaturas.

3.     Evita la exposición directa al sol  

Te lo diremos hasta el cansancio. Evita la exposición directa al sol, especialmente durante las horas centrales del día (entre las 12:00 y las 16:00 horas), que es cuando más quemaduras se producen. 

4.     No te arriesgues  

Evita usar camas y cámaras de bronceado, tipo de radiación ultravioleta emitida por estos aparatos se llama UVA y no solo envejece prematuramente la piel, sino que produce las arrugas y manchas de la edad.  

5.    ¡Hidrátate! 

Las pieles secas y deshidratadas suelen sufrir más los efectos de los rayos UV. Por eso es importante tomar agua, usar sueros y/o cremas para la cara y el cuerpo, así como bálsamos en los labios.  

6.     Usa protector solar  

Este paso no es opcional y además es lo mejor que puedes hacer para proteger tu piel. Es fundamental usar protectores solares con un Factor de Protección Solar (FPS) mínimo de 30 y reaplicarlo cada 4 horas aun cuando no salgas de tu casa. Y si estás expuest@ directamente al sol, lo ideal es reaplicarlo cada 2 horas. No olvides orejas, labios, cuello, manos y aquellas zonas que estén expuestas. 

Elige el mejor protector solar para ti: 

  • Si vas a estar expuest@ a la luz solar directa durante un periodo de tiempo, elige un protector solar con un FPS 50 como mínimo, ya que si te quemas con facilidad, un FPS alto te dará mejor cobertura. 
  • Elige un protector de amplio espectro, ya que protege la piel tanto de los rayos UVA como de los UVB. Los rayos UVA tienen longitudes de onda más largas que pueden provocar quemaduras y cáncer de piel. Los rayos UVB tienen longitudes de onda más cortas que pueden provocar quemaduras, manchas y arrugas. 
  • Reaplica cada 2 o 4 horas, según sea el caso y hazlo con más frecuencia si tu piel está en contacto con el agua.  
  • No olvides revisar la fecha de caducidad, ya que si está caduco no cumplirá con su función.