Enfermedades

La artritis psoriásica, padecimiento difícil de diagnosticar

“Las personas que viven con artritis psoriásica no están solas y pueden tener una mejor calidad de vida, si el paciente tiene a su alcance las herramientas correctas, como lo son el diagnóstico temprano, un tratamiento dirigido y un equipo multidisciplinario”, apuntó la doctora Alejandra López, fundadora de la Clínica Especializada para el tratamiento de Psoriasis y Artritis Psoriásica (PSOAPS).

La artritis psoriásica (APs) es una artropatía inflamatoria crónica progresiva, asociada al desarrollo de daño estructural articular y discapacidad, es decir, cursa con dolor, hinchazón, calor, dificultad de movimiento de la articulación inflamada y con el tiempo, posibilidad de deformación. Se trata de una enfermedad crónica que evoluciona de manera irregular a lo largo de la vida.

Se ha reportado que hasta 40% de los pacientes con psoriasis puede desarrollar artritis psoriásica, las fases iniciales de la enfermedad pueden resultar de difícil diagnóstico, incluso para el reumatólogo, se estima que de un 10 a 29% de los pacientes con psoriasis que acuden a dermatología podrían padecer artritis psoriásica y que ésta no es sospechada por el dermatólogo, lo que resulta en un retraso en el diagnóstico (1).

“En el caso del Reumatólogo, es frecuente que preste poca o nula atención a la afectación cutánea o ungueal (uñas) del paciente, a pesar de que ésta pueda tener un impacto severo en la calidad de vida de la persona”; apuntó la reumatóloga Alejandra López.

El impacto emocional

“En cuanto a una persona se le diagnostica artritis psoriásica, es muy importante iniciar un tratamiento intensivo lo antes posible”, apuntó la doctora Karla Macías, dermatóloga cofundadora de la Clínica Especializada PSOAPS.

“Actualmente existen muchas opciones de tratamiento para nuestros pacientes con artritis psoriásica, la decisión de manejo es dirigida para cada paciente y tomando en cuenta la colaboración de los principales especialistas implicados en el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad; el dermatólogo y el reumatólogo”, anotó la especialista.

La artritis psoriásica no solo es más agresiva de lo que se pensaba previamente, sino que sus manifestaciones tienen un alto grado de variabilidad de un paciente a otro. “El grado de afección sistémica suele ser muy elevado, nuestros pacientes se presentan con obesidad, síndrome metabólico, afección hepática y sin duda con un alto impacto psicológico”, señaló la doctora Alejandra López.

“En el caso de la psoriasis (PsO), por ser muy visible, a menudo provoca rechazo social, y si existe dolor y limitaciones por los problemas articulares, la repercusión en la vida personal, familiar y laboral del paciente incidirá de forma considerable en su calidad de vida”, subrayó la doctora Karla Macías.

Asimismo, la doctora López señaló que desde el 2012 las recomendaciones de la European League Against Rheumatism (EULAR) hace notar la importancia de un abordaje multidisciplinario (2). Actualmente, el implemento de clínicas multidisciplinarias para el manejo de la psoriasis ha cobrado auge, con el objetivo de mejorar la condición del paciente ante la enfermedad.

“La participación multidisciplinaria para la atención del paciente con artritis psoriásica, permitirá que se brinde un mejor control de la enfermedad, mayor detección y manejo adecuado de las comorbilidades, con resultados favorables respecto a la patología con base en la atención de al menos 4 especialistas, como el dermatólogo, reumatólogo, nutriólogo y psicólogo”, puntualizó la doctora Alejandra López.

Referencias

1.- L.C. Coates, P.G. Conaghan, P. Emery. Sensitivity and specificity of the classification of psoriatic arthritis criteria in early psoriatic arthritis. Arthritis Rheum, 64 (2012), pp. 3150-3155

2. Z. Ash, C. Gaujoux-Viala, L. Gossec, E.M. Hensor, O. FitzGerald, K. Winthrop, et al.A systematic literature review of drug therapies for the treatment of psoriatic arthritis: Current evidence and meta-analysis informing the EULAR recommendations for the management of psoriatic arthritis. Ann Rheum Dis, 71 (2012), pp. 319-326