Moderna lanza su vacuna contra COVID-19 actualizada para la temporada invernal 2025–2026
La inclusión de la vacuna contra COVID-19 en los lineamientos oficiales de salud marca un paso decisivo en la protección de la población ante la enfermedad respiratoria más prevalente en la actualidad. Moderna anunció que su vacuna ha sido incorporada en los Lineamientos Generales para la Campaña de Vacunación para la Temporada Invernal 2025–2026, emitidos por la Secretaría de Salud. Este avance resulta especialmente importante en un contexto donde la variante LP.8.1 del SARS-CoV-2, recomendada por la Organización Mundial de la Salud, se ha establecido como la más frecuente en la vigilancia epidemiológica en la región.
Un avance importante en la protección de los grupos vulnerables
Desde los seis meses de edad, la vacuna contra COVID-19 de Moderna puede ser administrada a personas con factores de riesgo o padecimientos crónicos, incluyendo enfermedades pulmonares, cardiovasculares, obesidad, diabetes, cáncer o inmunosupresión. La estrategia pública busca ampliar la protección de estos grupos vulnerables, que son los más expuestos a complicaciones graves y mortalidad a causa del virus. La vacunación en niños, en adultos mayores y en personas inmunodeprimidas se ha posicionado como la principal herramienta para reducir hospitalizaciones y muertes relacionadas con la enfermedad respiratoria.
La vacunación contra COVID-19 no debe considerarse solo como una protección individual, sino también como un acto de responsabilidad social. La inclusión en la campaña de la vacuna de Moderna refleja un compromiso de las autoridades sanitarias para fortalecer la inmunidad colectiva, además de alinear la estrategia con las recomendaciones internacionales.
Aplicación conjunta con otras vacunas para una protección más integral
Otra estrategia clave es la administración simultánea de la vacuna contra COVID-19, con las vacunas contra la influenza y neumococo, consideradas seguras y eficaces por la Secretaría de Salud. Este esquema coordinado busca ampliar la cobertura inmunitaria, especialmente en personas con factores de riesgo, mujeres embarazadas, personal de salud, adultos mayores y quienes viven con enfermedades crónicas, en línea con la necesidad de reducir la carga de infecciones respiratorias en la temporada invernal. La vacunación combinada no solo simplifica el proceso para los pacientes sino que también permite optimizar recursos y potenciar la protección en toda la población.
La fortaleza tecnológica y la eficiencia en la distribución
El laboratorio Moderna reafirma que su vacuna contra COVID-19 ha demostrado una inmunogenicidad robusta, generando memoria inmunológica que proporciona protección a largo plazo contra formas graves del virus. La plataforma biotecnológica flexible de Moderna ha permitido adaptar rápidamente la vacuna ante la aparición de nuevas variantes, asegurando una protección continua para la población mexicana. Hasta el momento, Moderna ha entregado 4.8 millones de dosis que ya están en fase de distribución, asegurando su disponibilidad para el inicio de la campaña de vacunación 2025–2026, en coordinación con las autoridades sanitarias para un despliegue equitativo en toda la nación.
Román Saglio, Director Senior de Alianzas Comerciales para América Latina de Moderna, comenta que su empresa se ha comprometido a facilitar la distribución oportuna y eficiente, apoyando los esfuerzos del gobierno en la protección de todos los grupos poblacionales, especialmente los más vulnerables.
La importancia de una estrategia de vacunación adaptada y efectiva
Este año, el Gobierno de México hace un histórico en la inmunización contra COVID-19 al incorporar por primera vez una vacuna actualizada en su campaña anual. La vacuna contra COVID-19 de Moderna, diseñada específicamente para luchar contra la variante LP.8.1, representa una solución efectiva frente a un escenario epidemiológico en constante cambio. La integración de esta vacuna en el esquema inmunizador refleja una estrategia sólida y adaptada a los desafíos que presenta la pandemia en su fase más reciente.
Las autoridades destacan que seguir actualizando las vacunas y mantener una distribución coordinada y efectiva será decisivo para reducir la incidencia de enfermedad severa en la temporada invernal, respondiendo a un reto clave de salud pública. La protección contra COVID-19, en conjunto con las acciones preventivas habituales, puede marcar la diferencia en mantener a la población segura y saludable durante los meses más fríos del año.