Nutrición

Los amplios beneficios de los probióticos en la salud y la alimentación

Investigaciones científicas sugieren que además de beneficiar al aparato digestivo, los efectos positivos de los productos probióticos también se reflejan en otras áreas del cuerpo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que los alimentos probióticos son los que contienen microorganismos vivos que al ser ingeridos en dosis adecuadas ofrecen múltiples beneficios a la salud gastrointestinal. Los principales son: lactobacilos, bifidobacterias, estreptococos, y levaduras. 

En los últimos años se incrementó el número de investigaciones en torno a los probióticos, pues la comunidad científica está cada vez más convencida de que el microbioma intestinal (conjunto de microorganismos que viven en los seres vivos) juega un papel determinante en en el mantenimiento del resto del cuerpo. La Dra. Megan Rossi, especialista en salud intestinal, afirma que el 70% de las células de nuestro sistema inmune vive en el intestino,  lo cual implica que la salud de éste sea fundamental para nuestra inmunidad ante  enfermedades.

Bob Rastall, experto en biotecnología alimentaria de la Universidad de Reading, indica que los cambios en las bacterias intestinales tienen el potencial de modificar el estado de ánimo. Una prueba contundente de ello es lo publicado por la revista Frontiers in Psychiatry, en donde se establece que la fórmula probiótica de los alimentos impacta positivamente en los perfiles de comportamiento en niños con autismo.

Desde otra perspectiva, la exploración científica proyecta que en un futuro los probióticos sean el sustituto de algunos medicamentos más hostiles para el ser humano. No hace mucho la Asociación Americana de Gastroenterología (AGA por sus siglas en inglés) aprobó el uso de suplementos probióticos para prevenir infecciones bacterianas, como la C. difficile, en adultos que consumen antibióticos de manera constante con el mismo propósito. 

Otras evidencias detallan que los probióticos son efectivos en el mejoramiento de la función inmunológica, en la distribución adecuada de azúcar en la sangre y hasta como un remedio contra el acné. Lo anterior de acuerdo con la Dra. Roshini Rajapaksa, gastroenteróloga de la Escuela de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York, quien también revela que a pesar de los avanzados descubrimientos aún es muy prematuro considerar a los probióticos como una cura, por lo que se deben clasificar como un tratamiento. 

De los laboratorios a tu mesa 

Al conocer los beneficios en la salud que brindan los probióticos es normal que las personas sientan curiosidad por consumirlos. Estos se encuentran en alimentos fermentados con probióticos naturales y se sugiere ingerir alrededor de uno a 10 mil millones de UFC (Unidades Formadoras de Colonias) diarias para las personas sanas.

¿Qué aconseja un experto? La nutrióloga Fernanda Santoscoy de YEMA, el primer supermercado consciente y sustentable de México, recomienda consumir los probióticos en la mañana, que es cuando los niveles de ácido clorhídrico en el estómago son más bajos. Esto ayuda a que las bacterias sobrevivan y colonicen el intestino. 

YEMA también ofrece probióticos accesibles como el té Kombucha de jengibre cítrico o moras silvestres. Este producto es el resultado de una fermentación de bacterias y levaduras conocida como SCOBY (Symbiotic Culture of Bacteria and Yeast), que procesa el azúcar del té produciendo enzimas digestivas, probiótico¡s, vitaminas y ácidos saludables para el sistema digestivo. 

Sin duda, el estudio de los probióticos abre interesantes campos de investigación científica para la industria alimentaria que deriven en actualizaciones e innovaciones que favorezcan la salud de la población. Los alimentos probióticos son elementos que cualquier que desee un estilo de vida más saludable debe incluir en su alimentación y poner en la lista de compras. 

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