Covid

El rol del ultrasonido y la tomografía computarizada en el seguimiento a los efectos a largo plazo del COVID-19

Determinar el impacto a largo plazo del COVID-19 será uno de los principales desafíos para los especialistas médicos cuando a más de un año de que comenzó la pandemia se ha descubierto que algunos pacientes post-COVID experimentan problemas de salud persistentes como fatiga, tos a largo plazo, problemas cognitivos y otros padecimientos, meses después de recuperarse de la fase aguda de la enfermedad. El seguimiento clínico apoyado por las tecnologías adecuadas juega un papel esencial para el tratamiento de estos padecimientos.

La mayoría de los pacientes que superan la infección por COVID-19 no presentan complicaciones; sin embargo, un estudio publicado por el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) indica que más de un tercio de las personas diagnosticadas con la enfermedad en Estados Unidos no habían regresado a su estado de salud habitual dos o tres semanas después de dar positivo [1].  Un estudio mediante tomografía computarizada (TC) de seguimiento de seis meses a un grupo de 114 pacientes que se recuperaron de una neumonía grave por COVID-19 mostró que el 35% tenía anomalías que podrían indicar un daño pulmonar potencialmente permanente [2].

De ahí el creciente interés epidemiológico en la morbilidad después de la infección aguda en los sobrevivientes, y la importancia de dar un seguimiento específico a los pacientes con efectos a largo plazo.

En este contexto, Philips líder mundial en tecnología de la salud quiere resaltar la importancia y la utilidad del seguimiento mediante ultrasonido, tomografía computarizada y software de análisis avanzados en pacientes que se han recuperado de la enfermedad.

La tecnología de ultrasonidos de Philips, con sistemas que ofrecen imágenes de alta calidad y diseño ergonómico que facilitan su uso en diferentes y desafiantes entornos, ayuda a los médicos a hacer evaluaciones rápidas y confiables de las condiciones pulmonares y cardíacas de los pacientes con síntomas persistentes.

La Tomografía Computarizada convencional y espectral también ofrece ventajas en términos de evaluación de imágenes sin realce, así como de imágenes con contraste. Con un solo escaneo de dosis baja, la Tomografía Computarizada espectral puede permitir a los radiólogos ver más en una imagen, lo cual es de vital importancia cuando se trata de detectar émbolos pulmonares.

Los cardiólogos están analizando más de cerca los posibles efectos cardiovasculares a largo plazo en los pacientes post-COVID que aún muestran síntomas mucho tiempo después. En un estudio español de 139 trabajadores de la salud que tenían COVID-19 se encontró evidencia de pericarditis y miocarditis, aproximadamente 10 semanas después de la infección la prevalencia de pericarditis o miocarditis se encontró hasta en un 40% de los casos. La pericarditis coexistió con algún grado de inflamación miocárdica concurrente en el 11% de los casos [3]. Estos hallazgos indican la necesidad de una investigación continua de las consecuencias cardiovasculares a largo plazo del COVID-19.

“Es importante concientizar sobre la importancia de la creación de protocolos de seguimiento para  la atención del COVID persistente, y apoyar la investigación de la sintomatología mediante diagnóstico que contribuya a evitar futuras complicaciones y determinar un programa de seguimiento integral para el tratamiento de los efectos a largo plazo; evitando que  pacientes que fueron dados de alta regresen al hospital por alguna complicación que pudiera evitarse con un diagnóstico oportuno y eficiente.” señala el Dr. José Rosales Rosales, Jefe de Resonancia del Instituto Neuro Cardiovascular de las Américas.

Para obtener más información sobre las soluciones de ultrasonido y tomografía computarizada de Philips, visite el sitio https://www.philips.com.mx/healthcare/medical-specialties/covid-19#!=&triggername=menu_one

Referencias

 [1] Symptom Duration and Risk Factors for Delayed Return to Usual Health Among Outpatients with COVID-19 in a Multistate Health Care Systems Network — United States, March–June 2020

[2] Six-month Follow-up Chest CT Findings after Severe COVID-19 Pneumonia

[3] Pericarditis and myocarditis long after SARS-CoV-2 infection: a cross-sectional descriptive study in health-care workers