¿Demasiado bueno para ser verdad?

diciembre 17, 2021enero 31, 2024 Yesica Flores

Los hechos en torno a los edulcorantes alternativos

Segunda Parte

Aspartame: controvertido y efectivo

Este edulcorante artificial ha sido motivo de controversia con el paso de los años. Abundan en internet los casos en que se culpa a esta sustancia de todo: desde caída del cabello a problemas de salud más graves.

En algunas de las primeras investigaciones que se hicieron en Italia, se relacionó al aspartame con ciertos tipos de problemas de salud en ratas, pero evaluaciones posteriores de los datos pusieron en duda dicha investigación. A la fecha, no hay estudios que relacionen al aspartame con efectos adversos para la salud, la FDA le ha otorgado el estatus de GRAS.

El aspartame tiene más o menos el mismo número de calorías por gramo que el azúcar normal, cerca de cuatro, pero es de 200 a 300 veces más dulce, o sea que se puede obtener el mismo nivel de dulzura con una pequeña cantidad de aspartame.

Como la mayoría de los edulcorantes bajos en calorías, el aspartame influye en el azúcar de la sangre. Es uno de los edulcorantes artificiales más comunes del planeta.

Debe hacerse notar que los individuos afectados por el defecto genético conocido como fenilcetonuria (PKU) lo deben evitar totalmente, ya que no pueden metabolizar el aminoácido fenilalanina de forma eficiente. Si el nivel de éste en la sangre se eleva demasiado, pueden presentarse problemas neurológicos, de comportamiento y dermatológicos. Te recomendamos siempre acercarte con un profesional de la salud para confirmar restricciones en tu dieta.

¿Maltodextrina para endulzar?

La maltodextrina es un polvo blanco producido de una variedad de almidones, como arroz, papa, trigo y maíz. Es común como aditivo para alimentos, y suele usarse como espesante para incrementar el volumen o la consistencia de un producto procesado. Como es fácil de producir, se encuentra en todo: desde gelatinas a salsas, aderezos para ensalada, polvos para preparar bebidas y hasta en cremas y champús. Además, también se usa como conservador.

La maltodextrina suele no tener sabor, además de que contiene una cantidad relativamente pequeña de azúcar, pero sigue siendo rica en calorías —cerca de cuatro por gramo— y es altamente procesada. La maltodextrina también se absorbe rápidamente en el torrente sanguíneo, por lo que no es buena opción para las personas preocupadas por mantener niveles saludables de azúcar en la sangre.

Es un carbohidrato que se digiere rápidamente, excelente para bebidas deportivas y barras energéticas. No se necesita mucha agua para digerirla y se puede obtener calorías eficientes sin el riesgo de deshidratación.

Jarabe de yacón: magnífico para la salud del intestino

El jarabe de yacón es un edulcorante alternativo popularizado recientemente como opción para contribuir a la disminución de peso. Es un derivado de la planta yacón, también llamada Smallanthus Sonchifolius, un tubérculo nativo de América del Sur. El jarabe ya cuenta con el estatus de GRAS ante la FDA.

A diferencia de muchos otros edulcorantes alternativos, el jarabe de yacón sí contiene algo de azúcar en forma de fructosa, sacarosa y glucosa, azúcares que le confieren su sabor dulce, similar al de la melaza, aunque no deja de ser muy bajo en calorías, con cerca de 1.3 calorías por gramo: más o menos un tercio de las del azúcar.

El jarabe de yacón se compone principalmente de lo que se conoce como fructooligosacáridos, un tipo de fibra soluble. Estas fibras no se digieren, se abren camino por el intestino grueso, donde pueden alimentar a las bacterias intestinales útiles. En muchos estudios se ha visto que tener una flora intestinal sana puede ejercer efectos positivos en la salud general, entre otros, ayuda al control del peso y apoyo para el sistema inmunitario.

El jarabe de yacón es un azúcar alternativo que no soporta las elevadas temperaturas relacionadas con cocinar u hornear, en virtud de lo cual su uso es para dar sabor a alimentos ya cocinados o crudos.

¿Y los beneficios de la miel para la salud?

Hace milenios que consumimos y disfrutamos de la miel, con frecuencia mencionada como superior al azúcar. La verdad es que la miel todavía contiene una gran cantidad de azúcar, que se presenta en forma de glucosa y fructosa, o sea que consumida en exceso puede acarrear algunos de los mismos problemas.

La miel contiene aproximadamente 75% de esos azúcares comunes, y el 20%-25% restante se divide entre agua y rastros de grasa, fibra y proteína. Con 3.34 calorías por gramo, la miel tiene ligeramente menos calorías que el azúcar, pero también es más densa que ésta, es decir que, si endulzas el café o el té con una cucharada de miel en vez de una cucharada de azúcar, en realidad estarías consumiendo más calorías.

Lo que diferencia a la miel de otros edulcorantes es que contiene antioxidantes, como vitamina E. La miel de trigo sarraceno y otras mieles florales tienden a contener muchos más antioxidantes, lo que es importante ya que pueden ayudar a la salud en general combatiendo los radicales libres en el organismo.

Solo hay que asegurarnos de no recurrir exclusivamente a la miel como fuente única de antioxidantes, pues habría que consumir mucha para satisfacer esas necesidades y se rebasaría la cantidad diaria recomendada de azúcar. La mayor parte de las frutas y verduras contienen antioxidantes en concentraciones significativamente más altas y son más importantes para una dieta saludable.

La mayoría de las personas considera a la miel como segura, pero hay un bajo riesgo de botulismo, que podría poner en peligro la vida de los bebés que consuman miel, por ello los profesionales de la salud recomiendan evitar dársela a menores de 12 meses de edad.

La miel también está disponible en polvo y como la miel líquida, tiene la capacidad de absorber la humedad del aire, sus azúcares pueden fermentarse y echarla a perder, por ello lo mejor es mantenerla en un envase sellado.

Los edulcorantes alternativos y la piel

Con frecuencia, el azúcar se incluye en las listas de alimentos que deben evitarse si queremos una piel saludable. Hay muchos vínculos populares entre problemas de la piel y dietas ricas en azúcares, pero las evidencias científicas no son tan claras. Hay un vínculo entre el acné y las dietas de alto índice glicémico, aunque faltan investigaciones que lo confirmen. Pero ¿qué efecto producen los edulcorantes alternativos en la piel?

No hay evidencias concretas que demuestren que los edulcorantes alternativos impactan en la piel. La recomendación científicamente validada para que la piel tenga un aspecto saludable es que la dieta sea integral, con abundantes verduras y frutas.

Sé consciente en el consumo de edulcorantes alternativos

Si te encuentras eligiendo entre la gama de edulcorantes alternativos, hay muchos factores a considerar, como la seguridad, efectividad y los potenciales efectos secundarios.

Parece ser que la miel y el jarabe de yacón (tubérculo nativo de América del Sur), podrían ser las mejores opciones para la salud, por el beneficio que brindan a la flora intestinal.

Debido a que muchos edulcorantes alternativos son significativamente más potentes que el azúcar, es posible que sus receptores se estimulen en exceso. Si te vuelves dependiente de algo tan dulce, es probable que encuentres a los alimentos saludables, como frutas y verduras, menos atractivos.

Si bien es casi imposible evitar por completo el azúcar, la buena noticia es que no es necesario hacerlo del todo. El azúcar natural se puede encontrar en muchos alimentos y es una parte saludable de una dieta equilibrada. Una manzana, por ejemplo, tiene una gran cantidad, pero también contiene fibra y varios micronutrientes que compensan muchos de sus aspectos negativos. El peligro proviene del azúcar añadida que se encuentra en muchos alimentos, generalmente incluidos por los fabricantes para mejorar el sabor.

Ya sea que estés a dieta, preocupado por tu piel o tengas otros problemas de salud, el azúcar natural y los edulcorantes alternativos saludables pueden desempeñar un papel importante. Pero siempre hay que considerar la moderación, así como consultar con un especialista de la salud o de la nutrición. El hecho de utilizar edulcorantes alternativos no significa que podamos consumir cantidades excesivas de azúcar en otros alimentos, en otras palabras, no busques dulces o panes solo porque tomes un refresco dietético.

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