Control y manejo de la artritis reumatoide: estrategias para mejorar la calidad de vida

La artritis reumatoide es una de las enfermedades crónicas más prevalentes en la población adulta, afectando de manera significativa la calidad de vida de quienes la padecen. Aunque no existe una cura definitiva, los avances en tratamientos farmacológicos y en la detección temprana permiten controlar los síntomas y reducir el daño articular. La importancia del manejo oportuno radica en que esta enfermedad autoinmune provoca inflamación en las articulaciones, lo que con el tiempo puede desencadenar deformidades, limitación de movimientos e incluso afectar otros órganos, como los ojos, los pulmones y el sistema cardiovascular.

El impacto de la artritis reumatoide en la salud pública

Según datos de la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades reumáticas, entre ellas la artitis reumatoide, representan la segunda causa de consulta en hospitales y ocasionan altos niveles de discapacidad y ausentismo laboral. En su mayoría, afecta a mujeres, siendo en México que tres de cada cuatro personas con esta enfermedad son mujeres, y la edad promedio de diagnóstico oscila entre los 25 y 55 años. La incidencia por cada 100 mil habitantes es de aproximadamente 36 en mujeres y 14 en hombres. Esto evidencia la relevancia de promover diagnósticos tempranos y tratamientos efectivos para mejorar la calidad de vida.

Diagnóstico y síntomas de la artritis reumatoide

La detección de la artritis reumatoide puede ser un desafío, ya que en las fases iniciales presenta síntomas que muchas veces se confunden con otras enfermedades. Sin embargo, existen parámetros que ayudan a identificarla, como un incremento en la tasa de sedimentación globular (VSG) y niveles elevados de proteína C reactiva en la sangre, que reflejan un proceso inflamatorio activo. La inflamación en las articulaciones se manifiesta con:

• Dolor y rigidez que suele ser mayor por las mañanas o después de periodos de descanso
• Hinchazón, calor y sensibilidad en las articulaciones afectadas, principalmente las pequeñas, como manos y pies
• Fatiga, fiebre leve y pérdida de peso sin causa aparente
• Limitación en la movilidad y deformidades en etapas avanzadas

Es fundamental acudir al médico si los síntomas persisten o empeoran, ya que un diagnóstico temprano permite comenzar un tratamiento adecuado que puede disminuir la progresión de la enfermedad y mejorar la función articular.

Tratamientos disponibles y avances médicos

En el manejo de esta enfermedad, los medicamentos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (DMARD), como las terapias biológicas y bloqueadores del factor de necrosis tumoral (TNF), han demostrado ser efectivos para frenar la inflamación y prevenir el daño estructural. Estudios clínicos recientes indican que comenzar el tratamiento en etapa temprana reduce significativamente los signos y síntomas, además de promover la recuperación funcional.

“Con la llegada de terapias biocomparables y nuevos fármacos, estamos logrando que la artritis reumatoide se vuelva una enfermedad mucho más manejable”, afirma el Dr. Max Saráchaga, director médico de Amgen México. La innovación en medicamentos permite que los pacientes mantengan su movilidad y puedan continuar con sus actividades diarias sin limitar su calidad de vida.

Artritis psoriásica: un desafío en pacientes con psoriasis

El impacto de las enfermedades reumáticas no se limita a la artritis reumatoide. La artritis psoriásica es otra condición que afecta aproximadamente al 30% de las personas con psoriasis, una enfermedad dermatológica que genera manchas rojas cubiertas de escamas plateadas, principalmente en codos, rodillas, cuero cabelludo y tronco.

Por lo general, se manifiesta años después del diagnóstico de psoriasis, pero en algunos casos sus síntomas aparecen antes o simultáneamente a los cutáneos. La artritis psoriásica tiene un impacto importante en la salud, ya que provoca inflamación en las articulaciones, afectando especialmente dedos de manos y pies, así como la columna lumbar. Sus síntomas incluyen:

• Dolor y hinchazón en las articulaciones y tendones
• Rigidez matutina que puede durar varias horas
• Cambios en las uñas, como hendiduras, roturas o separación del lecho ungueal
• Inflamación ocular y molestias en la región lumbar

Este tipo de artritis también carece de una prueba definitiva para su diagnóstico, pero los estudios ayudan a descartar otras causas. Los tratamientos actuales, incluyendo los fármacos biocomparables que actúan sobre las células inmunes, han demostrado reducir la progresión del daño y mejorar la función física.

“Amgen trabaja en el desarrollo de terapias que ayuden a controlar estas condiciones, promoviendo que los pacientes puedan mantener su movilidad y reducir el dolor. Nuestro compromiso es mejorar su calidad de vida con opciones terapéuticas que combaten la inflamación y previenen discapacidades a largo plazo”, señala el Dr. Saráchaga. La clave para el manejo efectivo de la artritis reumatoide y la artritis psoriásica radica en la detección temprana y en la continuidad del tratamiento, que en muchos casos debe ajustarse según la evolución de la enfermedad.

El papel de la concienciación y la educación en estas enfermedades

Además de los avances en tratamientos, la concienciación pública y la educación sobre la artritis reumatoide y el resto de las enfermedades reumáticas son fundamentales. Muchas personas ignoran los signos tempranos o los confunden con molestias pasajeras, por lo que la información y la detección temprana pueden marcar la diferencia entre mantener la movilidad o enfrentarse a discapacidades.

“En Amgen, además de enfocarnos en desarrollar medicamentos innovadores, priorizamos la difusión de información confiable para promover el diagnóstico temprano y el manejo integral de estas patologías”, afirma Saráchaga. La colaboración entre instituciones de salud, asociaciones civiles y la industria farmacéutica garantiza que la población tenga acceso a las mejores opciones de tratamiento, así como a programas de sensibilización que incentiven la consulta médica inmediata ante cualquier signo de inflamación o dolor persistente.

En vista de la tendencia mundial, el septiembre de la artritis reumatoide y otras enfermedades reumáticas sigue siendo un mes de gran importancia para reforzar la conciencia sobre el impacto de estas patologías en la sociedad, impulsando acciones que permitan un diagnóstico oportuno y un mejor control de los síntomas. La investigación continúa avanzando, ofreciendo nuevas esperanzas y posibilidades a quienes viven con estas condiciones, reafirmando que una intervención temprana y un tratamiento adecuado son la mejor estrategia para preservar la salud, la movilidad y la calidad de vida.