Cómo monitorear la pérdida de masa muscular y malnutrición
El envejecimiento es una parte natural de la vida, pero la forma en la que lo enfrentamos puede impactar significativamente nuestra calidad de vida. A partir de los 40 años, muchos adultos pueden experimentar una disminución importante en su masa muscular, llegando a perder hasta un 8% cada década. Esta tasa de pérdida se puede duplicar a partir de los 70 años, lo que resalta la urgente necesidad de prestar atención a este aspecto de la salud.
Las causas de la pérdida de masa muscular relacionada con la edad son complejas y la malnutrición juega un papel crucial en este proceso. La malnutrición se refiere a un desequilibrio en la ingesta de nutrientes necesarios para mantener una buena salud y afecta aproximadamente a 1 de cada 3 adultos mayores de 65 años. A menudo, esta condición se presenta de manera sutil, pero sin una intervención temprana, puede conducir a serias complicaciones, incluyendo un aumento en la pérdida de masa muscular.
Implicaciones de la Malnutrición y la Pérdida de Masa Muscular
La malnutrición en personas mayores puede surgir por diversos factores, como una ingesta inadecuada de alimentos, cambios en el sentido del gusto, problemas de digestión y absorción, o incluso enfermedades crónicas. Todas estas variables pueden agravar deficiencias nutricionales, acelerando la pérdida de masa muscular.
Las repercusiones de la malnutrición y la pérdida de masa muscular no tratadas son significativas. Las personas afectadas suelen experimentar debilidad crónica, baja energía y una disminución en la movilidad, lo que dificulta la realización de actividades cotidianas y la participación en pasatiempos que solían disfrutar. Además, existe un incremento en el riesgo de hospitalización, así como una recuperación prolongada en caso de enfermedades o lesiones.
El Rol de las Pruebas Periódicas
Debido a que la malnutrición y la pérdida de masa muscular no siempre son fácilmente visibles, es esencial llevar a cabo revisiones periódicas. Los profesionales de la salud tienen un papel crucial en la identificación y tratamiento de la malnutrición dentro de la comunidad. La medición regular de la pérdida de masa muscular y el estado nutricional en clínicas, centros de atención para adultos mayores y residencias asistidas pueden facilitar la detección temprana y permitir intervenciones nutricionales oportunas y personalizadas.
Algunas herramientas útiles incluyen:
- MSAT App: Esta aplicación, en conjunto con el dispositivo SQUEGG, permite evaluar la salud muscular a través de la fuerza de agarre de la mano. Investigaciones recientes han mostrado que esta combinación permite detectar de manera efectiva problemas de pérdida de masa muscular en más de 3000 adultos.
- Cinta Calf-C: Un dispositivo sencillo que mide la circunferencia de la pantorrilla, es esencial para evaluar la masa muscular y detectar la sarcopenia y la malnutrición de forma temprana.
- Calculadora de Edad Muscular: Considerando varios factores, esta herramienta puede ayudar a determinar la fuerza muscular de la parte inferior del cuerpo de los adultos en la comodidad de su hogar.
- PRONTO: Esta herramienta, diseñada por especialistas, se utiliza para evaluar el estado nutricional de pacientes oncológicos, identificando riesgos nutricionales de manera eficaz.
- R-MAPP: Esta aplicación garantiza que los pacientes sean evaluados incluso durante consultas virtuales, facilitando el monitoreo continuo.
Más Apoyo para Mejores Resultados
Detectar a las personas en riesgo de malnutrición mediante un tamizaje adecuado puede influir positivamente en los resultados de salud, pero este es solo el primer paso. Los profesionales de la salud deben colaborar con nutriólogos certificados para proporcionar intervenciones nutricionales personalizadas que se enfoquen en la ingesta equilibrada de calorías, proteínas y nutrientes esenciales.
Generalmente, los adultos mayores requieren un mayor consumo de proteínas para preservar la masa muscular y la fuerza. Incorporar alimentos ricos en proteínas como carnes magras, productos lácteos y legumbres es crucial. En casos donde la ingesta de alimentos sea insuficiente, se pueden recomendar complementos nutricionales como Ensure o Glucerna de Abbott para satisfacer las necesidades.
Monitorear y abordar de manera proactiva la pérdida de masa muscular y la malnutrición puede no solo preservar la calidad de vida, sino también prevenir complicaciones graves que afectan a la población mayor